Aportes de la Historia

Notas dispersas sobre Historia

Diario del reconocimiento de la frontera de Buenos Aires, efectuado por el teniente coronel Francisco Betbezé de Ducos. Día 25 de marzo de 1779

[13 de marzo – 8 de abril de 1779]
[Diario del reconocimiento de los fuertes de la frontera de Buenos Aires, efectuado por el teniente coronel Francisco Betbezé de Ducos] (1)

 

 

Emprendimos la marcha á las seis de la mañana, por 0. 4 N. 0., pasamos inmediato á dos pequeñas lagunas accidentales, una de estas con juncal muy largo, y espeso, su agua dulze aunque  poca, y la otra la tenia bien displicente al paladar comunicandose con el rio salado; lo mas del terreno andado en esto transito es vajo, y como aguachirnos, ó especie de bañados en tiempo de medianas aguas. ó lluvias.

Llegamos á las once del dia al arroyo de las Flores,   donde reconocí el paraje demarcado por los Pilotos para erigir un fuerte, que positivamente está en medio de una llanura tan vaja que denota ser bañado, y sin tener el mismo sitio loma alguna ni elevacion de terreno la mas minima en que fundar la fortificacion, ni el pueblo proyectado; Y en caso de ser  absolutamente necesario avanzar hasta esta distancia, é inmediaciones el antiguo que le corresponde, no veo otro parage mas aparente que el de la misma orqueta que hace de la parte ([oriental]) del Norte el significado Salado con la Laguna do las Flores, donde esta de mediada extensión, aunque de poca ondura, y comunicandose, según dejo insinuado con el dicho rio, lo que igualmente le sucede con el arroyo de su nombre, que  a corta distancia dirige su curso casi paralelo al del referido Salado. La profundida de entranbos río y Arroyo llegaba a la cincha de los cavallos, las aguas son aquí generalmente salobres, de suerte que los animales no quisieron beberla, aunque venian bien sedientos, ni la gente pudimos tragar la que provamos de varios pozos que se hicieron, lo que contribuyó a que ([marchasemos]) (saliesemos) luego de aquel paraee, marchando por el S. 0. á hacer noche junto á una Laguna que llamaron de Betbezé, de muy buena agua para los animales, y los pozos que se hizieron en su orilla la dieron ,excelente ([a la gente]).

 El trecho de onco leguas ([desde las Flores]) (de este transito) hasta aqui es la mayor parte de bañados, en tiempo de medianas aguas, lo que haca que casi todo es pajonales y Yerva Jarrilla.

Antes de llegar a las Flores muy serca de la orilla del Salado hallamos un Indio muerto, que no obstante de estar casi seco ([dejaba]) se distinguia haber recibido una grave herida por la espalda.

 Reconocimos por varios vestigios, osamentas de Potros, plantas de Maiz, y algunas de Avichuelas, que en dichas orillas del Salado, junto á su orqueta con las Flores, de la banda del Sur, y tambiénen del mismo lado en las costas de esta Laguna y Arroyo de su nombre hubo años há no pocas Tolderías.

 Tres cuartos de ora antes de llegar al campamento pasamos el Arroyo del Saladillo con agua muy salada, y que con algún pantano, o rango llegaba á la rodilla de los caballos, comunicando á algún trecho de donde se pasó con una Laguna accidental, cuyo nombre se ignora, y con el Río Salado.

 Es de advertir que el Ayudante de Milicias don José Antonio Lozano y otros informan, que en ocho dias de mancion, que hicieron en el Arroyo de las Flores una partida crecida de gente que años hace iba acargo de don  Clemente Lopez, se les enfermaron cuarenta hombres atribuyéndolo  á las aguas los facultativos que llevaban. ([Deja inferirse que la mala calidad del campo transitado hoy no permite la mantencion de Bagualadas ni ganado respecto a que apenas se ha visto un muy corto numero de Yeguas]). Vimos un corto número de Baguales.

 

Cita:

(1) Levene, Ricardo (advertencia), Primer congreso de Historia de lo Pueblos, Caítulo V ,Apéndice Documental, Direcciónes de impresiones oficiales, La Plata, 1952, pag.67:68.

Edición: Maximiliano Van Hauvart, estudiante UNMdP.

Print Friendly, PDF & Email

Carlos-2

Volver arriba