Declaración del cautivo Branco Xavier Diaz, febrero de 1784
Branco Xavier Diaz, a quien los Indios apresaron en este partido de Luján el 28 de Agosto del año pasado, llegó a esta Guardia el día 2 del corriente mes escapando de ellos, confiesa lo siguiente:
Que lo llevaron en marchas aceleradísimas a trote, y galope, hasta aproximarse a la sierra grande a un arroyo llamado de los sauces, o salado grande en donde se mantienen porción considerable de indios.
Que allí le dijo una cautiva que muy anciana llevaron ahora muchos años, hacía once años estaba en aquel paraje y en este tiempo no habían llegado christianos a él.
Que habían los indios pensado venir a Insultar nuestros partidos, y principalmente el de Areco, pero que atendiendo a la gran seca que se experimenta han suspendido efectuarlo.
Que el indio Lorenzo hermano del Cacique Inacayal [difunto] le dijo a dicho cautivo Xavier Diaz, que aunque por ahora no venía, ya por la seca, y ya porque se retiraran a los montes en busca de algarroba; pero que poco a poco se habían de vengar de las injurias recibidas por los cristianos de prenderles sus parientes, y matárselos, y que con el tiempo esperaban arruinar hasta la Ciudad de Buenos Aires, pues respecto a que habrían pedido Paces, y no tenían noticia de concederlas, no le quedaba a él, ni a sus Indios otro arbitrio, que el continuar la guerra sin cesar.
Que siempre y cuando le dieran paces los cristianos entregaría once que allí tiene cautivos, y los demás que pudiese juntar en los demás indios independientes del referido Lorenzo.
Que el campo se halla actualmente tan seco, de modo que dificulta vengar los indios por este motivo.
Que entre los indios ha habido varias enfermedades, de las que han muerto muchos, aun chicos como grandes.
Y que a gran prisa marchaban a los montes a cosechar la algarroba de donde piensa el declarante no volverán hasta de aquí a tres meses. Fuerte de Luján 6 de febrero de 1784. Juan Joseph Diaz.
Interrogatorio
Preguntando: cuánto ha que salió de entre los indios
Responde: que hoy día nueve de febrero hace [ocho] que se separó de los indios mas de dos meses.
Preguntando: que enfermedad era la que tenían los indios
Responde: que sarampión.
Preguntando: en qué tolderías ha estado
Responde: que en la del Cacique Juan Umano de nación Aucar.
Preguntando: que cuántas tolderías eran.
Responde: que diecisiete y que serían poco mas de cien indios.
Preguntando: cuántas tolderías tendrá el Cacique Lorenzo y en que punto está situado
Responde: que consigo tendrá como quince toldos y está cerca de Juan Umano en el salado grande, pero que en toda la sierra adentro tiene mucha indiada.
Preguntando: de qué se ha mantenido y si ha hallado agua en el camino.
Responde: que no ha comido otra cosa que cardos y huevos de Avestruces corrompidos los mas, y bebido únicamente el agua del rocío de la paja, o pasto, el que sacudía en su poncho y mojado le chupaba.
Preguntando: si Juan Umano, y el Cacique Lorenzo tienen mucha caballada.
Responde: que sí se hallaban con gran porción.
Preguntando: que si desde que se halló en los toldos han hecho convocatoria los Caciques, o se han remitido charques para juntarse contra nosotros
Responde: que nada de esto ha oído.
Preguntando: si después que llegaron con él a los toldos ha visto o ha oído decir hayan salido partidas de indios para nuestros campos o costas del salado con intención de insultarnos, llevar ganado o potrear.
Responde: que desde que llegaron a los toldos cuando fue cautivo, no tan solo sabe que se había juntado indiada para venir nuevamente, pero que ni a potrear han salido de su toldería, y que de las demás inmediatas no tiene noticia ninguna hayan salido respecto de haberlos dejado en sus bebidas.
Preguntando: si se ofreciese el caso de salir a buscar a estos Indios, se hallaría capaz de ponernos donde dejó las tolderías
Responde: que siempre que lo pusiesen en la primera sierra no tendría dificultad llegar al paraje donde dejó los toldos.
I habiéndole leído esta su declaración, dijo no tenía que añadir ni quitar en ella y que se afirma y ratifica en todo su contenido bajo el juramento que ha presentado, que es de edad de treinta años, poco mas o menos, y lo firmaron conmigo los testigos.
Testigo Manuel Martinez, Juan A Hernandez, Juan Jph Diaz.
Mayo, Carlos (Ed.), Fuentes para el estudio de la frontera, voces y testimonios de cautivos, fugitivos y renegados. (1752-1790), Grupo Sociedad y Estado “Ángela Fernández”, F.H., Depto. De Historia, UNMdP, 2002, pp.(61:63).
Edición y corrección: Van Hauvart Duart, Maximiliano L. Estudiante de Letras. FH, UNMdP.