Fuentes para el estudio de la colonización de las Provincias Unidas de los Paises Bajos en América.
Fuente Nro.:3
Fragmentos del relato de David De Vries en Nueva Holanda (1656) . Parte 3
por Diana A. Duart CEHis-FH-UNMdP y Carlos A. Van Hauvart CEHis-FH- CNAUI-UNMdP.
D.N.D.A. Registro de autor 5.274.226
Introducción
La historia escolar ha limitado el tratamiento de otras experiencias coloniales en el Nuevo Mundo, focalizada en la experiencia colonial de Castilla y con algunas referencias a Portugal, creemos que es necesario también realizar un tratamiento al desarrollo colonial de Inglaterra, Francia, las Provincias Unidas de los Países Bajos y Suecia en América. Esto ayudara a ver el proceso en un conjunto más amplio y entender las enormes implicancias, políticas, sociales y económicas que estas experiencias provocaron en los estados que la realizaron.
Autor, obra y contexto
Oliver Rink en su texto “Holland on the Hudson” (1) nos remite permanentemente a la obra del Historiador J. Franklin Jameson (1859/1937) , “ Narratives of New Netherland, 1609- 1664” (2) , que el lector encontrara digitalizada por la Universidad de Luisiana (VER).
En ella se compila una serie de descripciones sobre el proceso de ocupación de los comerciantes holandeses y de la Compañía de Indias Occidentales en lo que se denominó New Holland, especialmente la experiencia en los Fuertes de New Amsterdam y New Orange.
Hemos elegido publicar un breve fragmento del relato de las Notas de David Devries, Publicados en 1655 con el extenso título propio de la época, en el cual relataba su experiencia como marino en América, Asia, África y Europa:
“Korte Historiael, ende Journaels Aenteyckeninge van verscheyden Voyagiens in de vier deelen des Wereldts-Ronde, als Europa, Africa, Asia, ende Amerika gedaen, Door D. David Pietersz. de Vries, Artillerij-Meester vande Ed: M: Heeren Gecommit-teerde Haden van Staten van West-Vrieslandt ende ‘t Noorden-quartier. Waer in verhaelt werd wat Batailjea by to Water gedaen heefi : Y der Landtschap zijn Gedierte, Gevogelt, wit soorte van Vissen, ende wat wilde Menschen naer ‘t Leven gecon-terfaeyt, ende van de Bosschen ende Ravieren met haer Vruchten. t’Hoorn. Voor David Pietersz. de Vries, Artillerij-Me,ester van ‘t Noorder-quartier. Tot Alckmaer, by Symon Cornetizz. Breke-geest, Anno 165″
De Vries nació en 1593 en la Rochelle hoy Francia de madre había nacido en Amsterdam y su padre en Holanda del Norte en Hoorn. Como su familia paterna se inició en el aprendizaje de la navegación de barcos junto a la caza y pezca de ballenas, con el correr del tiempo como capitán de embarcación se dedicó al transporte de cargas comerciales por todos los océanos.
Trabajo para la Compañía de Indias Orientales y Occidentales de la Provincias Unidas de los Países Bajos (hoy Holanda) y para Francia. Entre 1632 y 1644 tuvo intereses económicos en el territorio de Nueva Holanda o Nuevos Países Bajos, intento de manera privada con otros accionistas Holandeses colonizar áreas cerca de la entrada del delaware, fundando Zwaanendael, que se dedicaría básicamente a la pesca de ballenas, al cultivo del tabaco y todo tipo de granos. Esta experiencia término de la peor manera, cuando los iroqueses atacaron este enclave, asesinando a todos los colonos y destruyendo el fuerte.
El lector podría verse sorprendido por la larga carrera como marino que desarrollo De Vries y en los lugares que estuvo por su trabajo, sin embargo no es una vida excepcional, cientos de navegantes holandeses lo hicieron, trabajando para diferentes Compañías Comerciales de diversos Estados, las distancias que debieron afrontar en sus empresas comerciales, las alianzas entre diversos grupos económicos que muchas veces competían entre sí para obtener beneficios en el tráfico comercial, muestran lo complejo que se había convertido el comercio de ultramar, las distancias eran enormes pero articulados en el sistema-mundo que explico Immanuel Wallerstein.
Por último agregamos, que los juicios e informes que De Vries enviados a las Compañías Comerciales, eran tenidas en cuenta por su honestidad, fue un observador agudo y preciso en las descripciones que narró haciéndolo creíble como fuente histórica. Es considerado como uno de los grandes viajeros del siglo XVII.
La fuente que hoy presentamos nos describe básicamente la alimentación de los iroqueses, la anterior hacia incaìe en las activiades de recolección o en la agricultura, en esta el relato se centra en las actividades de la caza.
La siguiente traducción del texto en ingles de J.Franklin Jameson está realizada en torno al uso de la Historia Escolar, se han dejado de lado ciertas precisiones debido a la complejidad del texto, (eliminando las citas aclaratorias del editor.) como las puntuaciones.
Of what Sort and Condition of Men this Nation consists, how they are clothed, and what Magistrates they have.
En qué género y condición de hombres consiste esta nación, cómo están vestidos y qué magistrados tienen.
Como he relatado la forma de vida y la apariencia de los salvajes en Fort Orange, voy a decir algo de las naciones que habitan cerca de Fort Amsterdam; como los indios Ilackinsack, Tapaen y Wicquasgeck; estos se encuentran a unas dos, tres o cuatro leguas de la entrada del río.
Su forma de vida es en su mayor parte como los de Fort Orange; sin embargo estas naciones de indios son más fuertes y más marciales, especialmente los Maquas tributarios de los demás, como se mencionó anteriormente, a lo largo del río hasta Fort Amsterdam.
Los indios de aquí abajo también son tolerablemente robustos, tienen pelo negro, con un largo mechón, que trenzan y dejan colgando a un lado de la cabeza. El pelo está esquilado en la parte superior de la cabeza como el peine de un gallo, como se muestra en la placa. Su disposición es mala. Son muy vengativos; se parecen a los italianos.
Su vestimenta es un abrigo de pieles de castor sobre el cuerpo, con el pelaje en el interior en invierno, y en el exterior en verano; también tienen, a veces, una piel de oso, o un abrigo de pieles de gatos salvajes, o hesspanen, que es un animal casi tan peludo como un gato salvaje, y también es muy bueno para comer. Lo he comido con frecuencia, y lo he encontrado muy tierno.
También llevan abrigos de plumas de pavo que saben trenzar; pero como nuestra nación holandesa ha comerciado aquí, cambian sus castores por telas de duffels, que nosotros les damos, y que les parecen más adecuadas que las de los castores, ya que las consideran mejores para la lluvia; y toman dos y medio de longitud de duffels, que es de nueve cuartos y medio de ancho.
Su orgullo es pintar sus rostros extrañamente con color rojo o negro, para que parezcan demonios. Ellos son entonces valientes; se dicen asi mismos que son Mannette, el mismísimo diablo.
Algunas de las mujeres son muy bien formadas y de gran estatura. Su cabello cuelga suelto de su cabeza; son muy desagradables y sucias; a veces se pintan la cara, y a veces dibujan un anillo negro alrededor de los ojos.
Cuando desean limpiarse de su suciedad, van en el otoño, cuando comienza a hacer frío, y hacen cerca de un arroyo corriente, una pequeño choza, lo suficientemente grande para que tres o cuatro hombres se acuesten en él.
Para hacerlo, primero toman ramas de árboles y luego las cubren con arcilla, para que el humo no pueda escapar.
Para ello, toman una cantidad de piedras, que calientan en un fuego, y luego las meten en el horno, y cuando creen que está lo suficientemente caliente, sacan las piedras de nuevo, y se acuestan en él horno, hombres y mujeres, niños y niñas, y salen tan transpirados, que cada pelo tienen gotas de sudor en él. En este estado se sumergen en el agua fría; diciendo que es saludable, pero yo dejo pasar su salubridad: entonces vuelven completamente limpio siendo más atractivos que antes.
Las muchachas se consideran llegadas a la feminidad cuando empiezan a tener sus períodos mensuales, y en cuanto los tienen, van y se disfrazan con una prenda, que lanzan sobre su cuerpo y se tapan la cabeza de modo que apenas se ven los ojos, y huyen durante dos o tres meses, lamentando que deben perder su virginidad; pero por todo ello no omiten sus diversiones por la noche, u otro tiempo intempestivo.
Terminado este período, se despojan del disfraz y se adornan con una cantidad de zeewan (objeto de valor para las primeras naciones) sobre el cuerpo, la cabeza y el cuello; luego van y se sientan en algún lugar, en compañía de algunas indias, demostrando que están dispuestas a hacer un trato.
El que corteja mejor y da más zeewan se la lleva a casa, y permanece con ella a veces tres o cuatro meses y luego se va con otro; a veces en un mismo mes según se inclinen por el uno o el otro. Los hombres no son celosos, e incluso prestan sus esposas a un amigo.
Les gustan las reuniones, el jolgorio y el baile; pero las mujeres se ven obligadas a trabajar como asnos, y cuando viajan, a llevar el equipaje junto con sus hijos, si los tienen, atados a una tabla. (3)
(1) Rink, Oliver A., Holland on the Hudson, an economic and social history of dutch New York, Cornell University Press, 1987, p. (27)
(2) Jameson, Franklin J., Narratives of New Netherland, 1609- 1664, Charles Scribner`s son, Nueva York, 1909, pp. (259: 263)
(3) ob.cit., p.219.
Edición: Max Van Hauvart Duart, estudiante UNMdP.
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